
"Un anillo especial, porque tú no eres como las demás"
Es lo que le dice Mr. Big a Carrie Bradshow en la escena donde le pide matrimonio. La clásica montura de solitario de compromiso reconvertido en una pieza de joyería con muchísima personalidad como la de la protagonista de Sexo en Nueva York.

Y es que no sabemos por qué, pero las piedras preciosas negras son muy atractivas. Cuando hablamos de diamantes, el halo de misterio se multiplica exponencialmente. Su origen extraterrestre contribuye más aún a este misticismo ya que proviene de una supernova.
El diamante negro es una piedra preciosa natural, porosa en su superficie que pertenece a la familia del Carbono cristalizado. En su estado natural son muy raros y en su gran mayoría son provenientes de Brasil.

Subestimados durante años en joyería, actualmente están de plena actualidad y aparecen en casi todas las colecciones de alta joyería combinados con diamantes blancos y otras piedras.
Para dar salida a la actual demanda algunos de los diamantes que se utilizan en joyería son diamantes oscuros tratados con calor para conseguir la tonalidad deseada.

El más importante diamante negro es el diamante de Grisogono con un peso tallado de más de 312 quilates acompañado de 702 brillantes blancos en la montura confeccionado en los años 90's.

Los encontramos en colección más espectaculares pero también en la joyería más minimalista. Y es que el diamante negro es una tendencia que ha llegado para quedarse.
Las celebrities no ha dudado en sumarse a la piedra más misteriosa y son muchas las que hemos visto en la alfombra roja luciendo piezas con brillante negro.

¿Cómo lo combinarías tú?
