El origen de la iglesia del Rosario se encuentra en una capilla construida en el siglo XVI como sede de las monjas agustinas. El retablo mayor del edificio, que ha sufrido varias reformas a lo largo del tiempo, alberga una hornacina de la Virgen del Rosario construida a finales del siglo XVIII. A ambos lados están los de San Servando y San Germán, atribuidos a Francisco de Villegas. Otra de las joyas de la ciudad de Cádiz.